RESTAURACIÓN DE UN BIOMBO ANTIGUO

¡Hola! Hoy al fin, os puedo mostrar el resultado de un largo proceso de restauración que le hemos hecho a un biombo antiguo que rescatamos de una vieja masía.
ANTES                     DESPUÉS
 
Éste era el estado en el que nos lo encontramos: viejas telas, raídas por el paso del tiempo, la humedad y el sol, y la madera en buen estado pero con suciedad acumulada de haber estado largo tiempo en una casa sin habitar.

 
Primero de todo empezamos por quitar las telas.

 
Nos encontramos con doble tela interior y uno a uno fuimos sacando todos los clavos pequeños que la sujetaban.
Dejando solamente el esqueleto del biombo, para poder limpiar toda la madera.

 
Para limpiar la madera, le aplicamos decapante, que a continuación sacamos con la ayuda de una espátula y estropajo de aluminio.

En la imagen superior vemos el proceso del decapado en la madera, y como finalmente queda limpia.
  
Limpiar entre las barritas de madera fue más complicado, por el poco espacio que había entre barra y barra. Para poder hacerlo, enredamos un poco de estropajo fino de alumino en un palillo largo, para poder pasar por todos los rincones. Y en lugar de aplicar en esta zona decapante, aplicamos un poco de disolvente directamente encima del estropajo.
Al estar la madera en perfecto estado, aplicamos directamente después un barniz protector mate. 

Y una capa de cera que posteriormente bruñimos con un trapo.
  
Una vez el esqueleto de madera estuvo restaurado, empezamos a coser las telas que queríamos colocar.

 
Para cortar bien el lino, medimos exactamente dónde queríamos cortar, y con una aguja marcamos el hilo y lo sacamos. De este modo, nos quedó perfectamente marcada la ranura en línea recta por donde cortar.
¡Para este proceso, tuvimos la ayuda de Silvia, gran amiga y mejor costurera!
 
Marcamos con agujas todos los dobladillos, para dejar las telas preparadas para pasar la máquina.
Con las telas ya listas, empezamos a unirlas a la madera. Para este proceso, usamos una grapadora.

Es muy importante tensar bien las telas, y sobretodo, colocarlas bien, empezando por grapar en el centro y en los extremos, y de allí, poco a poco ir tensando lado a lado y colocando grapas a ambos lados paralelamente para que la tela quede recta y bien colocada.

Y ya por último, colocamos tachuelas embellecedoras para tapar las grapas.

Con la ayuda de un botador y un martillo colocamos los clavos de las tachuelas continuas.
¡Y este es el resultado!

El biombo se ha colocado en un loft para separar el ambiente dormitorio de la sala de estar.

RESTAURACIÓN DE UN BIOMBO ANTIGUO

¡Hola! Hoy al fin, os puedo mostrar el resultado de un largo proceso de restauración que le hemos hecho a un biombo antiguo que rescatamos de una vieja masía.
ANTES                     DESPUÉS
 
Éste era el estado en el que nos lo encontramos: viejas telas, raídas por el paso del tiempo, la humedad y el sol, y la madera en buen estado pero con suciedad acumulada de haber estado largo tiempo en una casa sin habitar.

 
Primero de todo empezamos por quitar las telas.

 
Nos encontramos con doble tela interior y uno a uno fuimos sacando todos los clavos pequeños que la sujetaban.
Dejando solamente el esqueleto del biombo, para poder limpiar toda la madera.

 
Para limpiar la madera, le aplicamos decapante, que a continuación sacamos con la ayuda de una espátula y estropajo de aluminio.

En la imagen superior vemos el proceso del decapado en la madera, y como finalmente queda limpia.
  
Limpiar entre las barritas de madera fue más complicado, por el poco espacio que había entre barra y barra. Para poder hacerlo, enredamos un poco de estropajo fino de alumino en un palillo largo, para poder pasar por todos los rincones. Y en lugar de aplicar en esta zona decapante, aplicamos un poco de disolvente directamente encima del estropajo.
Al estar la madera en perfecto estado, aplicamos directamente después un barniz protector mate. 

Y una capa de cera que posteriormente bruñimos con un trapo.
  
Una vez el esqueleto de madera estuvo restaurado, empezamos a coser las telas que queríamos colocar.

 
Para cortar bien el lino, medimos exactamente dónde queríamos cortar, y con una aguja marcamos el hilo y lo sacamos. De este modo, nos quedó perfectamente marcada la ranura en línea recta por donde cortar.
¡Para este proceso, tuvimos la ayuda de Silvia, gran amiga y mejor costurera!
 
Marcamos con agujas todos los dobladillos, para dejar las telas preparadas para pasar la máquina.
Con las telas ya listas, empezamos a unirlas a la madera. Para este proceso, usamos una grapadora.

Es muy importante tensar bien las telas, y sobretodo, colocarlas bien, empezando por grapar en el centro y en los extremos, y de allí, poco a poco ir tensando lado a lado y colocando grapas a ambos lados paralelamente para que la tela quede recta y bien colocada.

Y ya por último, colocamos tachuelas embellecedoras para tapar las grapas.

Con la ayuda de un botador y un martillo colocamos los clavos de las tachuelas continuas.
¡Y este es el resultado!

El biombo se ha colocado en un loft para separar el ambiente dormitorio de la sala de estar.